LA OSA INA

Quienes me conocen mínimamente saben que soy animalista y que tengo un concepto del ser humano —como raza, en general— bastante peyorativo. Tengo en mis redes los videos, fotos y noticias de contenido aberrante en los que aparecen animales maltratados bloqueados porque no lo soporto, me duele y me saca lo peor con lo que, además del sufrimiento que me generan, si no me contengo me cerrarían las cuentas que nunca utilizo con fines personales. El video de la osa Ina pasó el filtro porque muestran unas imágenes limpias de una osa en el bosque, libre y sin heridas pero cuando lo vi y leí el texto que lo acompaña algo se me rompió por dentro y lloré. La osa Ina está atrapada en una jaula imaginaria aunque ahora vive en el Santuario Libearty porque ha permanecido encerrada en un espacio de tamaño minúsculo durante 20 años y sigue caminando en círculos, aunque ya no hay barreras físicas que le impidan pasear y disfrutar su libertad, como si siguiera en la prisión en la que la han encerrado durante más de dos décadas. “¡Qué horror!” —pensé cuando me di cuenta de la realidad de las imágenes que el Santuario ha querido compartir para concienciar y dar visibilidad al infierno y el maltrato que suponen ciertos zoos y circos para los animales que utilizan— “¡Qué terrible, pobrecita!” La osa Ina es incapaz de romper el bloqueo mental en el que se encuentra después de soportar el maltrato psíquico continuado pese a que, al fin, alguien ha roto su condena pero su mente es incapaz de darse cuenta. Seguramente el abuso de Ina también ha sido físico en algún momento porque no se amaestra a un oso por “las buenas”. Los osos son animales con aspecto adorable que nos recuerdan a un peluche pero no lo son y no son dóciles por naturaleza ni les gusta hacer todo lo que el humano les obliga a hacer. Doblegar el carácter indómito implica minar hasta que se cede, en cualquier ser vivo. En toda situación de maltrato están involucrados tres: el que lo padece, el que lo ejerce y el que lo presencia y lo consiente.¿Y tú cuál de esas tres personas eres? Porque hay una cuarta: la que apoya y tiende la mano. Soy animalista. Soy una persona que repudia cualquier forma de maltrato y pienso que la Educación es la clave. Vivimos en una sociedad donde semanalmente los casos de maltrato se superan por lo aberrante, una sociedad que resta importancia al maltrato psicológico, posiblemente porque es mucho más difícil de demostrar pero no por ello con consecuencias menos serias. Cada vez que la imagen de Ina caminando en círculos me viene a la mente no puedo evitar pensar en todas las Inas humanas que siguen en bucle viviendo una existencia miserable incapaces de romper su círculo —especialmente en el caso de adultos o niños que han compartido un hogar tóxico con un perfil narcisista—, de valorarse lo suficiente, de quererse y verse como realmente son, sin autoestima, desconfiadas e incrédulas si les viene algo bueno.

Terminar con esta lacra pasa, como casi todos los grandes problemas sociales, por recibir una educación correcta al respecto. Enseñemos a nuestros menores a respetar y a respetarse a sí mismos, a querer en vez de usar, a valorar y cuidar a los seres vivos como premisa y a nunca hacer a otros lo que no quisieran para ellos. ©Sonia Gonzálvez #animalista #noalmaltrato #quientequieretecuida #respetoporlavida #educacionparalavida